Propuestas de VOX sobre #Pensiones

Las propuestas sobre PENSIONES de VOX en este vídeo explicadas por el responsable del Consejo Político. Si quieres saber más sobre éste y otros temas puedes seguir leyendo más abajo para ver el programa electoral completo.

COMPROMISO DE VOX CON LAS PENSIONES.

PRINCIPIOS

En España todo el ahorro obligatorio para la jubilación se gestiona por un sistema de reparto en el que los cotizantes de hoy pagan la pensión de los jubilados de hoy. Este sistema asigna todos los riesgos demográficos y económicos al sector público, pone en entredicho su viabilidad presupuestaria en el medio plazo y tiende a ser inviable con una pirámide demográfica invertida.

Algunas de las características del actual sistema de pensiones son rechazables o censurables, como las siguientes:
– Irresponsabilidad individual e insostenibilidad económica. No se tiene en cuenta el impacto del declive demográfico y el hecho que la pensión no se calcule según el valor actuarial de lo cotizado en toda la vida laboral.

– Inseguridad jurídica y falta de transparencia. El trabajador en activo no sabe qué pensión le tocará el día de mañana, y nadie le garantiza que el gobierno de turno del futuro no le bajará la pensión que esperaba cobrar.

– No reconoce y respeta la propiedad privada. Si un trabajador muere a los 50 años, tras 25 de cotizar y tener menos renta, sus herederos no reciben nada. Con un sistema de pensiones basado en el ahorro privado, recibirían lo que haya ahorrado.
En VOX proponemos un cambio a otro sistema viable, solvente y solidario en el que los ciudadanos, en el ejercicio de su libertad, puedan gestionar su jubilación y les permita rentabilizar los fondos aportados durante su vida laboral. En VOX proponemos el cambio, tras un periodo de transición, a un sistema mixto de capitalización y reparto.
Nuestras propuestas tendrán un doble propósito. Por un lado asegurar a corto plazo el actual sistema y por otro, explicar las características del modelo mixto, que consideramos es garantía de sostenibilidad y libertad.
REQUERIMIENTOS EN EL ACTUAL SISTEMA

El sistema se debe basar en los principios siguientes:
1º Sostenibilidad.- La sostenibilidad permanente queda garantizada con la aportación del Gobierno que tiene el deber de corregir las sobrecargas producidas por la incorporación de pensionistas no contributivos obligados por circunstancias derivadas de preceptos legales.
2º Revalorización. La revalorización, objetivamente, no puede ser cuantificada en términos absolutos, e incluso en el supuesto de señalar un coeficiente, se hace necesario revisar su procedencia por el Órgano administrador, para evaluar y ponderar su correcta aplicación.
3º Equidad. La equidad, que es principio de justicia, se fundamenta en tres variables: la base de cotización, el importe de las primas y el período cotizado. Este es el principio equitativo que tiene que presidir el sistema de pensiones. Si bien el segundo principio que tiene que presidir el sistema es la determinación de la cuantía mínima de la pensión.
– Deben realizarse los estudios actuariales necesarios para adecuar las cotizaciones de manera que respondan a los salarios reales que figuren en las nóminas y que recojan toda la vida laboral, o cotizada, del jubilado.

– Debe permitirse que la decisión de jubilarse sea reversible y así como la posibilidad de compatibilizar el cobro de una pensión con percibir rentas salariales.
Proponemos:
– Acometer con urgencia la transición a un sistema mixto de capitalización y reparto La duración del periodo de transición dependerá de la evolución de la economía, de las posibilidades derivadas de las cuentas públicas y de las medidas acordadas. Serán requisitos básicos en este periodo que los jubilados actuales no se van afectados en sus ingresos netos y que no se dispare el déficit público.

– La exención de tributación de las pensiones contributivas. Esta medida supondrá un aporte de fondos a los pensionistas actuales que multiplicará su bienestar actual. Es importante destacar el importante impacto que esta medida tendrá en el aumento del consumo y por tanto en la recaudación que grava el mismo.
UN MODELO MIXTO DE CAPITALIZACION Y REPARTO

1. PILARES DEL MODELO DE VOX

VOX propone un sistema mixto de pensiones basado en los tres pilares siguientes:
I. Pilar de Reparto
En cualquier caso, debe existir siempre un pilar de reparto a cargo de los presupuestos del Estado, que garantice a todo el mundo una pensión mínima (incluidos los complementos a mínimos). Con ello se garantiza que aquellos que no han podido ahorrar a lo largo de su vida por desempleo o por cualquier otra razón, no se queden en la indigencia.

II. Pilar obligatorio de capitalización
Naturalmente, para evitar riesgos el pilar de capitalización debe ser obligatorio.
En este sentido, un porcentaje de las nóminas se ingresará en una cuenta individual para pensiones que cada trabajador decidirá dónde se invierte, dentro de una amplia panoplia de mecanismos, sistemas y agentes de inversiones que deberán ser aprobados y supervisados por el Banco de España.

III. Pilar de las aportaciones voluntarias
El tercer pilar del esquema serían las aportaciones voluntarias, es decir, aquellas que se encuentren por encima del porcentaje obligatorio (pilar de capitalización antes mencionado), que las personas decidan materializar.

2. PERIODO DE TRANSICIÓN
La transición se llevará a cabo mediante un reparto de las cuotas pagadas a la Seguridad Social de acuerdo al modelo siguiente:
– Un porcentaje se destinará, como hasta ahora, a las pensiones a los jubilados de hoy
– Un porcentaje se destinará a cuentas individuales de capitalización a nombre de cada trabajador
Este sistema de capitalización se iniciará en el segundo año de legislatura, y el porcentaje que inicialmente se destinará a las cuentas individuales de capitalización será el que permitan los ahorros en el gasto público conseguidos en el primer año de legislatura, así como el aumento de cotizantes por la mejora de la actividad económica que produzca el conjunto de medidas propuestas por VOX. A partir del tercer año el porcentaje destinado a las cuentas de capitalización irá aumentando según lo permitan los ahorros en el gasto público que se vayan consiguiendo y el aumento en el número de cotizantes que se vaya produciendo.
Durante este periodo de transición se deberá analizar el importe de la pensión mínima que a ser cubierta así como medidas adicionales con objeto de elevar el porcentaje destinado a las cuentas individuales de capitalización. Medidas como suprimir los topes de cotización contribuirán a este fin.
3. UN SISTEMA BASADO EN LA LIBERTAD DE GESTIÓN Y PROPIEDAD DE LAS APORTACIONES

La población ya trabaja y ahorra (con lo que aporta a la Seguridad Social) lo suficiente como para tener un patrimonio que le permita vivir con comodidad al llegar a la jubilación (momento que debe decidir cada persona, no el Estado). Lo único que les falta para conseguirlo es que el Estado no les impida reunir ese patrimonio, sino que se lo facilite, con un sistema de capitalización. Este sistema parte de un principio: la conexión entre el ahorro acumulado por una persona y los beneficios que obtiene de él.
Cuando hablamos de libertad de gestión hablamos de:
– Libertad para decidir dónde invertir sus aportaciones y para tratar de aprovechar las oportunidades que ofrecen los mejores sistemas de capitalización, los cuales combinan rentabilidades altas con costes de gestión bajos, diversifican geográficamente sus inversiones, permiten el rescate parcial de los fondos en determinadas circunstancias y garantizan unas cuantías mínimas para sus anualidades.

– Libertad para decidir la cuantía a aportar para su capitalización. Resultaría sorprendente comprobar el fondo que se generaría y que podríamos recuperar, si durante nuestra vida laboral aportáramos a estos fondos, una cuantía similar a la actualmente dedicada a sostener el actual sistema. Hablamos de disponer, a la fecha de jubilación, de un importante fondo y de la posibilidad de disponer de una pensión muy superior a la actual.
Comentamos anteriormente que un porcentaje de las cuotas pagas de destinará a cuentas individuales de capitalización. Estas cuentas no son planes de pensiones, sino cuentas desde las que se podrá invertir en una gran variedad de activos (depósitos bancarios, bonos, acciones, fondos de inversión, ETF’s, etc). Se excluirían productos de alto riesgo como CFD’s, opciones binarias, etc.
Habrá 2 modalidades de cuentas
1) Gestionadas de forma personal por cada ciudadano

2) Gestionadas por entidades gestoras (las gestoras de patrimonios registradas en la CNMV: bancos, aseguradoras, etc).

En cualquier momento se podrá cambiar de un sistema a otro, e incluso optar por los 2 a la vez, dedicando el 60% (por ejemplo) del dinero a una cuenta gestionada por gestoras y el otro 40% (por ejemplo) a una cuenta gestionada de forma personal.
Cuando hablamos de propiedad de las aportaciones, la misma lleva consigo:
– Mantener los fondos a salvo de decisiones políticas que son tomadas de espaldas a las opiniones y, en ocasiones, necesidades de los ciudadanos. Decisiones políticas de quienes confunden la esfera pública de la privada.

– Garantizar el derecho de los familiares a heredar el fondo constituido en caso de fallecimiento. Hablamos de apostar por mejorar la vida de las familias ya que con esta medida podrán disfrutar de una vida que ahora se les antoja imposible.

– Articular medidas que permitan rescatar las rentas que produjese el capital a ciertos colectivos como es el caso de parados de larga duración, especialmente de mediana edad, a los que se hubiese terminado la prestación por desempleo.

EXENCIÓN EN LA TRIBUTACIÓN APLICABLE A LAS PENSIONES CONTRIBUTIVAS

La propuesta de VOX es la exención de tributación en el IRPF de las pensiones contributivas. Esta propuesta supondrá que la exención de tributación, que VOX propone se sitúe en 12.000 euros con carácter general, se ampliará al importe total de la pensión recibida.
Veamos el impacto en varios casos: